Después de un intenso mes de exámenes puedo decir que he sobrevivido y estoy de vuelta. Hace unos días me enteré de que la periodista Carme Chaparro iba a sacar a la venta otro libro, y como No soy un monstruo me había gustado tanto, me moría de ganas de leer este.
He cambiado un poco el formato de la ficha y después de varios intentos, creo que se ha subido bien, porque las primeras veces empeoraba la calidad al subir la imagen (disculpadme si no es así😓).
Se trata de un thriller con los mismos personajes que la anterior novela No soy un monstruo (reseña haciendo clic en el título). Aunque se pueden leer de forma independiente, yo no recomiendo hacerlo, para así poder entender mejor a los personajes y ciertos comentarios. Definitivamente he descubierto mi género favorito, aunque siempre estoy abierta a otros tipos de lectura, y tampoco querría dedicarme a esta en exclusiva. Como siempre, os dejo la sinopsis y me pongo con la reseña.
He cambiado un poco el formato de la ficha y después de varios intentos, creo que se ha subido bien, porque las primeras veces empeoraba la calidad al subir la imagen (disculpadme si no es así😓).
Se trata de un thriller con los mismos personajes que la anterior novela No soy un monstruo (reseña haciendo clic en el título). Aunque se pueden leer de forma independiente, yo no recomiendo hacerlo, para así poder entender mejor a los personajes y ciertos comentarios. Definitivamente he descubierto mi género favorito, aunque siempre estoy abierta a otros tipos de lectura, y tampoco querría dedicarme a esta en exclusiva. Como siempre, os dejo la sinopsis y me pongo con la reseña.
Para la inspectora jefa Ana Arén no hay tregua: después de que resolviera el caso que prácticamente acabó con ella, debe enfrentarse a un reto endiablado, el asesinato de una de las mujeres más famosas de España.
Siempre cuestionada por su superior, al frente de un equipo que aún no confía en ella y con el foco mediático sobre la investigación, Ana se ve de nuevo ante un crimen aparentemente irresoluble en el que el tiempo y el pasado se empeñan en jugar en su contra.
Siempre cuestionada por su superior, al frente de un equipo que aún no confía en ella y con el foco mediático sobre la investigación, Ana se ve de nuevo ante un crimen aparentemente irresoluble en el que el tiempo y el pasado se empeñan en jugar en su contra.